01 agosto 2005
Zp y su Prestige
El incendio de Guadalajara ha puesto de manifiesto el efecto boomerang de algunas irresponsables manifestaciones de ZP que aplica a sus enemigos sin pensar que cualquier día se volverán contra él. Así, hacer responsable a Aznar de imprevisión ante los atentados del 11-M le colocó bajo una espada de Damocles que le viene obligando a poner en jaque a todas las fuerzas de seguridad ante cualquier recrudecimiento de la violencia terrorista, por temor a que cualquier nuevo atentado en España, por pequeño que sea, ponga en evidencia su propia imprevisión.
Ahora, un incendio con once muertes ha destapado todas las imprevisiones y sectarismos de ZP y los suyos, porque resulta que, ante la gravedad del incendio, la propia Esperanza Aguirre se puso en contacto con José María Barreda –presidente de Castilla La Mancha por el PSOE– pero no consiguió una respuesta y todos los medios preparados y en alerta para intervenir en Guadalajara se quedaron en Madrid, donde aún siguen. Sin embargo, aceptó la ayuda francesa cuyos hidroaviones llegaron dos días más tarde del inicio del incendio y cuando ya era incontrolable.
Todo ello contrasta con la versión ofrecida por Cristina Narbona, ministra de Medio Ambiente, quien mintiendo descaradamente insiste en que se pusieron todos los medios para evitar la propagación del incendio.
Y por si no fuera bastante, el PSOE hace gala de su cinismo y exige que no se utilicen las catástrofes naturales de forma partidista. Y eso lo dicen después de venir manteniendo que Aznar tuvo la culpa de la catástrofe del buque “Prestige”, aunque la diferencia entre ambos sucesos fortuitos son apreciables ya que la imprevisión de ZP es la responsable de once muertos.
Quizás ya hay fundamento y razones para empezar a gritar “ZP asesino” en lugar de aquel “Aznar asesino” que un socialismo oportunista se apresuró a adjudicar a quien era inocente de cualquier muerte.
Porque resulta que las muertes de Guadalajara son indiscutiblemente responsabilidad de ZP. Su imprevisión y el desprecio a la colaboración que la oposición podía ofrecerles así lo confirman.
ZP ya tiene muertes sobre su conciencia. ¿Por qué sigue sonriendo?